Por eso decía Gavilán, aproximándose y no que es la realidad.
Sin dudas que los factores que influyen en TODAS enfermedades son multifactóricos y no las podemos atribuir a una o dos cosas. Sin dudas que todas las enfermedades a veces eclosionan ante algo y atribuimos a ello como su razón.
Tampoco sirve poner ejemplos personales para explicar o negar algo. Un error filosófico común es inferir juicios generales de premisas particulares, basta encontrar un ej. para invalidar el razonamiento
A mi me cae horrible comer ajo crudo. Por mi experiencia personal puedo inferir que el ajo es “malo” para el hígado, pero sin embargo veo a mi alrededor personas deglutir ajos como si fueran caramelos, entre ellos mi abuelo. Si hago el razonamiento al revés suena mas interesante:
“Mi hígado está malo luego el ajo lo hace explotar”. Por mas que me quieran convencer de las bondades del ajo para la salud.
Entonces, una persona con problemas prostáticos, si consume productos como el alcohol y los picantes pueden agravar el problema, pero sería un error atribuirlo como su causa, salvo casos excepcionales, pero eso no significa que no haría bien en permanecer lejos esas cosas (y muchas otras mas).
Las enfermedades (entre ellas las inflamaciones y las infecciones), dependen del medio interno de nuestro organismo que está influenciado, por nuestra dieta, costumbres de vida, exposición a factores externos, herencia, situaciones de estrés, problemas emocionales y un larguísimo etc. en el que también debemos incluir el clima.
Ahora bien, hay una guía de orden mas general que puede ayudar a manejarnos en esta complejidad. En la medicina oriental una inflamación está causado por factores yin (expansivos) y “casualmente” el alcohol y los picantes en gral. están dentro de esta categoría, entonces está dentro de la lógica energética que una abstención de esos productos hagan mejorar el problema .
Una persona saludable y con una vida activa puede consumir estos productos sin problemas y jamás manifestará alguna molestia. Otro factor que tampoco se suele tener en cuenta es que nuestra alimentación es un equilibrio entre todos sus componentes y nuestras actividades. Una cosa es consumir alcohol e incluir carne en la dieta y otra muy distinta si se es vegetariano.
En ese contexto, es poco probable que la práctica de determinados ejercicios ocasionen esos problemas prostáticos, mas bien habría que buscar la causa en otros factores de nuestra vida cotidiana.
Aplicando esos principios le hice un tratamiento prostático exitoso a mi padre, variando su dieta complementado con algunos ejercicios respiratorios y físicos.