Pues las respuestas son algo raras. Son:
* contesta
* me gustaría saber
* qué hacer
* ??
Tengo la sensación de que nuestro amigo floripa ha introducido en realidad una frase: “contesta, me gustaría saber qué hacer” pero por partes. O sea, que no se trata realmente de una encuesta, simplemente ha abierto un hilo como una encuesta, sin querer, y el la frase título que tenía previsto le ha salido cortada en cuatro pedazos sin mucho sentido.
Minimini, gracias por los elogios, pero en realidad no es que tenga mucho mérito. Es gallego, en concreto, gallego reintegracionista, una de las dos normas existentes en Galicia.
La norma oficial emplea, por razones políticas obvias, la ortografía del español. Es la más usada, la enseñada en todos los niveles educativos y también, todo hay que decirlo, la subvencionada y amparada por el gobierno autonómico. Defiende la separación gráfica del gallego y el portugués (aunque algunos de sus defensores reconozcan la unidad del gallego y el portugués desde un punto de vista estríctamente lingüístico).
La norma reintegracionista dice lo contrario: que si la lingüística románica ha defendido desde siempre que el gallego y el portugués son dos variedades del mismo idioma, entonces no tiene mucho sentido separarlas ortográficamente. Emplea una ortografía en general más etimológica, continuadora de la historia de la lengua, y sus defensores buscan la reintegración cultural de Galicia en el ámbito de los territorios de lengua gallegoportuguesa (Portugal, Brasil, los países africanos de lengua oficial portuguesa -PALOP-, Timor Oriental…).
Yo entiendo las causas de la existencia de ambas normas y empleo las dos indistintamente. Aunque he de decir que me gusta hablar con gente de otros lugares en gallego y que me respondan en portugués de Portugal, en brasileño, y que la comunicación fluya sin problemas. Durante dos años viví en Lisboa y en todo momento me negué a imitar el acento portugués: hablaba en gallego, como hago habitualmente, día a día, en Galicia, y jamás tuve el mínimo problema de intercomprensión. Mas aún, con el gran desconocimiento que existe en Portugal acerca de la realidad gallega, muchos se asombraban “de que hablase tan bien portugués”. Yo siempre les contestaba lo mismo: “muchas gracias, usted también habla muy bien portugués”.
En realidad la situación entre el gallego y el portugués no es nada nuevo. Hay muchas variedades lingüísticas con situaciones parecidas: el macedonio y el búlgaro, el neerlandés y el bajoalemán, el noruego y el danés o el valenciano y el catalán.
Y con respecto a la cigala, seguiré dándole brasa para que crezca!
Abrazos!