Un mes, una semana y cuatro días con un rutina diaria dudosa...
Primero que nada, saludos a todos.
Tengo 20 años y hace unos meses descubrí el lado pornográfico de Twitter. Eso me animó a compartir algunas fotos de mi pene por allí, y me alegraba de las reacciones ajenas (que generalmente se enfocaban en que soy peludo, como mi nombre de usuario lo termina de confirmar). Pero, poco a poco fui conociendo a otros chicos que tuvieron la fortuna de nacer con penes más grandes (18 cm o más). Era algo que no me había preocupado especialmente porque creía que el mío (15 cm erecto) era proporcional a mi estatura y cuerpo (165 cm y delgado, sin pesar más de 60 kg). Eso fue hasta saber de un muchacho que era igual de enano que yo y aún así le medía 18 cm (poca diferencia en la realidad efectiva, pero en sus fotos parecía ser abismal).
Eso me llevó a buscar algo para intentar contrarrestar esa diferencia, y fue cuando me encontré con este foro y con la leyenda urbana de «El maestro del pene». No comencé con la rutina para novatos de acá porque la idea de hacer «jelqs» no me era muy grata, sobre todo por las advertencias que han puesto para no darse falsas esperanzas y, más allá, para no hacerse responsables si ciertos ejercicios dañan en vez de ser provechosos. Por ello, cuando me encontré con un PDF que me decía que podía conformarme con estiramientos, opté por esa rutina (que, como aclara el título, llevo haciendo por cierto período con unos «efectos secundarios» que me llenan de dudas).
Pero antes de especificar los efectos, voy a tomarme la libertad de copiar y pegar la rutina y explicar cuál fue el único cambio sustancial que le hice a la misma.
RUTINA
I. Antes de empezar
A. Mide exactamente tu pene
FLácido: Toma una regla y colócala sobre tu pene. Apriétala en el hueso pubococigeno (justo encima de la base del pene) sin hacerte daño, aguanta el pene cerca de la regla y toma la medida hasta la cabeza – Sin estirarlo.
Erecto: Mientras estas de pie, sujeta el pene en ángulo paralelo al suelo (en horizontal). Coge la regla y apriétala en el hueso pubococigeno y coge las medidas desde la base hasta la punta.
Grueso: Con el pene erecto (utiliza una cinta para medir,) toma la medida de la circunferencia a la mitad de tu pene.
Comparación visual: Intenta comparar el tamaño de tu pene con un objeto para referencia, por ejemplo: un desodorante, una botella de perfume, etc.
B. Vigila las medidas
No es necesario medir todos los días. Sin embargo, medir una vez por semana es siempre buena idea. Pueden ser solo unos milímetros o incluso centímetros por semana, ¡pero se va acumulando!
II. Calentamiento
Comienza el ejercicio diario con esta técnica. Realmente no es un ejercicio, pero se requiere para empezar. Lo que hace la compresa caliente, es estimular la fluidez de la sangre hacia tu pene, haciéndolo más flexible y moldeable. Haz lo siguiente:
1) Sumerge una toalla en agua tibia o caliente y exprímela seguidamente.
2) Cubre totalmente el pene (FLácido o erecto) y mantenlo así durante un minuto. Repite el procedimiento varias veces, durante unos 7 minutos…
3) Luego seca tu pene.
III. Técnica de estiramiento
1) Con el pene en estado FLácido, agarra la punta firmemente. Siempre asegúrate de no cortar la circulación.
2) Estira el pene directamente hacia delante. Estíralo lo más que puedas, sin causar dolor o malestar. Mantenlo así durante 4 ó 5 minutos. Después de cada minuto que pase, estíralo nuevamente un poco más.
3) Suéltalo y relájate durante un minuto. Luego gíralo 30 veces en círculo. – Esto hará que tu circulación vuelva a funcionar con normalidad.
4) Repite el paso número dos 4 veces variando la dirección de estiramiento: hacia la derecha, izquierda, arriba y abajo. Después de cada 5 minutos de estiramiento repite el paso número tres.
5) Después de haber hecho los 5 estiramientos de 5 minutos, haz un último estiramiento de 1 minuto hacia enfrente, aplicando 10 tironcitos, sin ser estos demasiado fuertes.
Respecto al cambio principal que hice, está relacionado con el «calentamiento». Intenté lo de la compresa caliente (en realidad un pañuelo sumergido en agua tibia) los dos primeros días (es decir, el 7 y 8 de noviembre), pero hacía un desastre porque siempre que exprimía el agua antes de colocarle sobre mi pene, también salpicaba el piso. Además de ello el agua se enfriaba rápido por lo que no era práctico.
Es por ello que pensé usar el mismo pañuelo pero haciendo que se calentara sobre el bombillo de mi lámpara de escritorio, que es de los viejos y por eso no se mantiene frío. Lo doblé dos veces de modo que quedaran cuatro capas y puse una de ellas directamente encima del bombillo. Lo dejé allí durante un minuto, luego deshice uno de los dobleces y coloqué el pañuelo donde se suponía que debía estar para hacer su propósito. De modo que los 7 minutos descritos en la sección II punto 2 de la rutina pasaron a ser 13 min. Desde el 9 de noviembre hasta hoy he seguido la rutina diaria con este cambio y nunca he sentido que mi pene se haya quemado, valga decir.
Los «efectos secundarios» que me preocupan, son los siguientes:
A. Siguiendo lo que la sección I (puntos 1 y 2) dice, tomé las medidas antes de empezar esta rutina y luego de hacerlo una vez por semana (los lunes). Así se fue presentando todo:
7/11/16 (antes de empezar la rutina)
FLácido: 9,5 cm.
Erecto: 15 cm.
Grueso: 14 cm.
Comparación visual: control del equipo de sonido.
14/11/16
FLácido: 11 cm (parece que no lo estaba completamente al compararlo con otros días en los que tomé medidas).
Erecto: 15 cm.
Grueso: 14 cm.
Comparación visual: la misma.
21/11/16
FLácido 9,5 cm.
Erecto: 14,5 cm.
Grueso: 14 cm.
Comparación visual: la misma, pero obviamente mi pene se veía ahora más pequeño que el control por esos 5 mm de diferencia.
Esos 5 mm me asustaron, pues creí que me estaban haciendo daño los ejercicios de estiramiento. Por ello no tomé las medidas el 28 de noviembre como tocaba.
5/12/16
FLácido: 10 cm.
Erecto: 15 cm.
Grueso: 14,5 cm.
Comparación visual: la misma.
El 7 de diciembre noté que el mero hecho de tener la regla en la mano hacía que mi erección disminuyera, supongo que por ansiedad (eso explicaría las medidas del 21 de noviembre). Y a su vez noté que el glande, estando ya erecto el pene, llegaba a tocar mi ombligo estando de pie. Si no recuerdo mal eso sólo pasaba antes cuando estaba sentado por lo que creo que eso demostró que algo sí he ganado en tamaño, aunque sean algunos milímetros nada más. No lo he constatado con nuevas medidas (debí tomarlas el 12 de este mes pero no lo hice por miedo), sin embargo. Como se verá, hay algo incongruente con las medidas, sobre todo con las medidas en estado FLácido y erecto, que han disminuido y aumentado sin aparente razón. Esta es una de mis preocupaciones, pues quiero estar seguro de que no terminaré haciendo que mi pene pase a ser más pequeño en vez de más grande.
B. Lo otro que me llena de dudas es que desde hace una o dos semanas he empezado a tener una dificultad al orinar… Tengo entendido que sólo es infección de orina si te duele cuando sale ésta del pene, y no es eso lo que sucede. Lo que pasa es que parece que nunca acabo de hacerlo, antes era un solo chorro constante y listo; pero ahora debo sacudir el prepucio varias veces y esperar algún tiempo extra aunque sienta que ya salió todo, porque siempre queda un residuo que a veces moja mis bóxeres cuando lo paso por alto. Parece algo normal aquello de estar seguro antes de salir del baño, pero antes de empezar la rutina no debía preocuparme porque no quedaban «residuos».
Espero me puedan decir, entonces, si debo cambiar la rutina o abandonarla definitivamente en pos de mi salud.
Les mando un abrazo y les pido disculpas por hacer un post tan largo.
Ultima edición fue de nomeafeitonada el 12-18-2016 a las .