Si, sigo vivito y “coleando”, aunque no haga PE activo…
Leí fragmentos del libro, y para nada me parecen argumentos extremos, quizas contados con crudeza y una prosa un tanto sobrecargada, pero al fin y al cabo es la manera de mostrar el otro lado de la historia, la que no cuentan las hordas “hembristas”, al igual que no la cuentan los vencedores de las guerras ( cuan despreciables fueron alemanes y japoneses!!!).
Cuando yo era pequeño creía que el León era el “Rey de la Selva”, fuerte, seguro y con una vida cómoda, que no tenía que cazar ni esforzarse para comer y sobrevivir, que era dueño y señor de un harén… Cuan equivocado estaba!! Pasados los años descubrí que los leones macho tienen una vida durísima, competitiva y peligrosa. Cuando son jóvenes son expulsados de las manadas y obligados a vagar en solitario, pasando hambre y peligros constantes, pues por su anatomía y tamaño no están diseñados para la caza sino para el combate. Que si quieren sobrevivir tienen que luchar por hacerse con los derecos de una manada y territorio, muchas veces a muerte, y cuando lo consiguen su hegemoní a penas les dura 1 ó 2 años, y la gran mayoría terminan muriendo de hambre o a causa de las heridas de sus combates…
Curioso, pero un docuemntal del NG, te puede abrir la mente tanto o más que cualquier tratado sociológico.
Saludos.
