Estoy totalmente de acuerdo, lo que pasa es que, sin que nos demos cuenta, a más de uno el tema nos puede obsesionar más de lo que creemos. Yo reconozco que al principio, debido a mi tamaño bastante pequeño, me obsesioné un poco durante los primeros dos o tres meses, sin embargo me tranquilicé mucho cuando al poco tiempo mi pene empezó a tener un tamaño, y sobre todo un aspecto, algo más “estandar”. A partir de ahí, al menos en mi caso, pienso que el PE bien hecho tiene que ser un entrenamiento como cualquier otro, igual que uno hace pesas porque le gusta tener los brazos fuertes, y otro se va en bicicleta cada día porque le gusta sentirse en forma, creo que es muy normal que a otros nos guste ejercitar nuestros penes para ganar algunos milímetros y, sobre todo (para mi, lo más importante) tenerlo al 100% y disfrutar mucho más con el sexo.
Yo creo que más que nada es una cuestión de satisfacción y de autoestima, sea por el motivo que sea, y aunque teóricamente no debería ser así, estaremos de acuerdo en que la mayoría de hombres y mujeres nos sentimos mejor con nosotros mismos cuando sabemos que tenemos un buen cuerpo, que somos guapos, que estamos bien dotados en pene, músculos, o las mujeres en pechos, caderas…lo que sea. Si nuestra pareja nos quiere le dará igual si estamos bien dotados o mal dotados, o si nos ha salido un grano inmenso en la punta de la nariz, sin embargo eso no es motivo para no intentar quitarnos el grano, es sólo simplemente porque uno se siente mejor sin el grano, ¿no creéis?
Saludos a todos, y especialmente agradecer a Chichi_Howards su interés en este tema, sin duda será de gran ayuda conocer sus impresiones!