Es alarmante. El problema es que los periodistas de hoy en día escriben artículos sin recursos, simplemente para rellenar espacios, y muchas veces sin cohesión entre las frases, es penoso.
Este sexólogo incompetente hace el peor de los delitos que se pueden hacer con la información, argumentar algo desde la completa ignorancia. Bueno, peor para él, se queda con un pito pequeño.