Muchachos: Todos coincidiremos en que el pene tiene su humor y sus días. No hay dos sesiones de jelq idénticas. A todos nos sucedió que hubo veces de demasiada erección para el jelq (no, Piruleto, no deberías pasar del 75 % de erección) y en cambio hubo otras veces en que parecía una serpiente desmayada. Cuando tiende a aflojarse, me resulta bueno hacer jelq hacia abajo, bien hacia abajo, y no sé por qué recupera un poco de “llenez”. Si no, puedes hacer el cierre OK con la otra mano, y así controlas la tensión interna. Es bueno sincronizar alternadamente este cierre con las kegels, de manera de ir entrampando más sangre en el interior. Así aumenta la tensión.
Si a pesar de todo no consigues recuperar la “llenez” puedes aprovechar y hacer bombeo manual, es decir, cierras con una mano -quizás con todos los dedos- y con la otra aprietas en distintos sectores, desde la mano que cierra hacia la cabeza.
Con el tiempo aprendí que conviene adaptarse a los humores fálicos y plegarse al estado de ánimo de la verga, haciendo los ejercicios que mejor convengan a la situación. No le gusta que la contrariemos.
Saluti a tutti,
Fefo.