Hola SuperPP:
No es necesariamente equivalente que un gran tamaño personal, deba necesariamente corresponder a un gran aparato sexual. Hay miles de casos que demuestran lo contrario; desde los jocosos pero no menos sorprendente casos de los “petizos” que asustan cuando se bajan los pantalones, o de los gigantones que se sienten ridículos en los vestuarios de los clubes.
Tal vez, solo tenga que ver la genética de nuestro predecesores y lo que podamos hacer nosotros con lo que fuimos dotados, pero no mucho más allá de lo que se pueda “estirar” nuestra naturaleza.
Mi observación personal y no otra cosa, me llevan a pensar que los de raza caucásica tienes dos características principales a saber: Pueden tener una verga grande en general, con abundantes eyaculaciones de siete o más pulsiones aunque con tendencia a la eyaculación precoz, y algo floja en cuanto a la rigidez general.
Los caucásicos orientales (polacos, eslovacos, etc) suelen tenerla más ancha que larga y también son generosos a la hora de las eyaculaciones.
Los asiáticos son en general de miembros menudos tirando a chicos con buena resistencia a obtener el orgasmo rápidamente y cuando lo hacen también son abundantes en eyaculaciones.
Los negroides (creo que no hace falta el comentario), suelen tener el miembro mucho más grande que el resto de los humanos, y salvo honrosas excepciones, su rigidez se ve afectada por la enorme cantidad de sangre que debe aportar el bazo, para mantener la presión corporal general, y además los 300 o más centímetros cúbicos de sangre para esas piezas anatómicas; aunque a la hora de eyacular, solo lo hacen muy brevemente y con una o tres pulsiones de semen no muy abundantes.
Tal vez por eso la naturaleza los dotó muy vergudos, a fin de inyectar el poco semen con seguridad en las profundidades de la vagina, lo que me hace pensar y aunque lo he podido comprobar; que deben haber algunas negras, que no solo se pueden aguantar semejantes cipotes, sino que además lo disfrutan pidiendo más, pero eso es un tema aparte.
Y luego estamos nosotros, los mestizos de raza blanca, latinos, con mezcla de algún indígena por ahí, que la tenemos un poco más chica que los caucásicos, pero que se caracteriza por tener una rigidez muy superior a los caucásicos, con eyaculaciones de cinco o seis pulsiones orgásmicas.
En resumen, estoy convencido que hay un límite fisiológico en cada uno de nosotros, que una vez llegado al mismo, no habrá incrementos perceptibles por más que se ejercite. Valga la mala comparación: Por más que corramos, no nos crecerán las piernas, nos hará más resistente, se harán más musculosos pero no crecerán, podremos aprender a cantar y mejorar nuestro canto con el ejercicio, pero no podremos ser soprano, contralto, ni barítono, solo dependerá de nuestra naturaleza. “Lo que natura non da Salamanca non presta”
Y si llegamos a nuestro límite máximo, será por un tiempo, luego volveremos a un máximo natural que será un poco menor que el máximo logrado.