Yo me confieso también, he pecado de entusiasmo y me he lastimado el amigo…
Piensas “a mi eso no me va a pasar”, “yo voy con cuidado” “creo que por estirar un pelín más fuerte esta semana, no pasará nada” y ahí es cuando tropiezas.
Tras llevar dos meses largos, empecé a estirar con excesiva intensidad, nunca llegaba a notar dolor al estirar, pero tantos tirones tantos días a la semana, con bastante intensidad, terminan erosionando el pene, y me irrité un trocito del lado izquierdo del glande.
El muy tonto de mí, en vez de parar por completo, descansé sólo unos pocos días, insuficientes, y luego retomé los estiramientos y jelqs de nuevo. La herida se enrojeció más, y nuevamente, en vez de parar por completo, dejé de estirar y me centré en sólo jelqs.
Craso error.
Volví a emocionarme, y al tiempo que antes empleaba en estirar, lo rellené añadiendo distintos ejercicios de jelq, y más tiempo y con pasadas más largas. Jelqs tradicionales, doblamientos en erección, algún squash jelq por aquí y por allá, cada vez más intensos y más lentos.
Realmente es casi adictivo en cierto modo, todo lo que es jelquear y sobretodo los squash jelq, son muy placenteros, porque visualmente te la ves gorda y venosa, y te dan ganas de seguir estrujándotela más y más, unido a esa sensación de querer correrte que va y viene en oleadas.
La tragedia estaba anunciada: mientras se va curando la herida del glande, me he hecho una nueva, más dolorosa, esta vez en el frenillo, de tanto apretar en los jelqs y sobretodo en los squashes.
Ahora me veo obligado a parar del todo, y sólo puedo hacer kegels, y aprovechar para hacer un poco de abstinencia total de masturbación, para “drenarme”.
Todo esto por dejarse llevar por la ambición y la impaciencia. El crecer 1.4 cm de largo en los 2 primeros meses me hizo sentirme eufórico, y ya empezaba a especular con futuros progesos, plazos, etc…
Me está bien empleado…
Dejo este comentario para que sirva de lección (sobretodo para mí mismo) y también para cualquier posible novato que lea esto.
El entusiasmo es bueno, pero en exceso puede ser perjudicial, y totalmente contraproducente, ya que si hubiera hecho las cosas bien ahora podría seguir entrenando y quizás ganando algo más todavía.
Aprovecho para preguntar una duda existencial… ¿este parón me afectará al crecimiento, podría perder las medidas conseguidas hasta entonces?