BENEFICIOS DE LA CAFEÍNA
Contrariamente a lo que se cree, la cafeína tiene su lado positivo. A pesar de ser ligeramente adictiva (si una persona consume regularmente gran cantidad de cafeína, y luego la suspende abruptamente, pudieran presentarse síntomas como dolores de cabeza y aletargamiento); tiene sus beneficios. La clave es el consumo moderado de hasta 400 miligramos al día, lo cual equivale a una taza de 16 onzas de café, una ración de helado de chocolate, más una lata de cola.
La ventaja más notable de la cafeína es que estimula el sentido de alerta, sobre todo en situaciones cuando el organismo no está en el máximo de funcionalidad. Esto quiere decir que el consumo de una bebida con cafeína mientras se estudia en la noche, cuando somos propensos a quedarnos dormidos, pudiera ser beneficioso.
La cafeína también mejora el rendimiento físico, incluso con la ausencia de un horario de sueño adecuado. Algunos estudios también indican que la cafeína puede contribuir a que una persona realice una amplia variedad de labores cognitivas con mayor rapidez, como reconocer diferencias en un patrón determinado.
En lo tocante a beneficios relacionados con la salud, la cafeína puede ayudar a reducir los dolores de cabeza, y también permite que los analgésicos surtan efecto con más rapidez. Por esa razón algunos productos analgésicos sin receta contienen cafeína en conjunción con el acetaminofén o el ibuprofén. La cafeína comprime los vasos sanguíneos, lo cual pudiera explicar por qué mitiga el dolor de cabeza. Además, se ha demostrado que reduce los dolores musculares. Según un estudio publicado en el año 2003 en la revista The Journal of Pain, el consumo de cafeína una hora antes de ejercitar pudiera reducir el dolor muscular durante la ejercitación.
PERO LA CAFEÍNA TIENE ASPECTOS NEGATIVOS
A pesar de sus beneficios, la cafeína también tiene su lado negativo. Primeramente, su acción estimulante puede contribuir a la aparición de trastornos del sueño y ansiedad en personas sensibles a sus efectos. La cafeína puede ayudar a que una persona no se quede dormida, reduciendo el tiempo de sueño y alterando las etapas normales del mismo.
Además, sus efectos perduran hasta seis horas después de su consumo. En el caso de personas ansiosas, incluso 200 miligramos de cafeína pueden provocar ataques de pánico y ansiedad.
Entre otras desventajas de la cafeína figura la posibilidad de que la misma pueda interferir con la reproducción. La cafeína puede reducir la vitalidad de las células espermáticas, y como se metaboliza de forma diferente en el organismo femenino, en dependencia de las etapas de su ciclo reproductivo, la cafeína puede afectar negativamente la implantación de un óvulo.
Con frecuencia, se les aconseja a las embarazadas que se abstengan de la cafeína, porque la misma afecta la placenta, y puede contribuir a un parto prematuro o al riesgo de un aborto, aunque esto último ocurre en muy raras ocasiones.
Además, la cafeína pudiera ser perjudicial para personas con problemas cardiacos, pues la misma incrementa la presión arterial y aumenta temporalmente el ritmo cardiaco. Por tanto, las personas que padecen de enfermedades cardiovasculares o tienen historia familiar de infartos, deben limitar seriamente la ingestión de cafeína.
En conclusión, aunque la cafeína goza de ligeras ventajas y de desventajas, su consumo moderado es algo que no debe preocuparnos. Si se sospecha de cualquier problema asociado con su consumo, debe consultarse con el médico.